ESCENA CULTURAL CONTEMPORÁNEA Y
DISCURSO RADIOFÓNICO
La dimensión sonora de la radio implica unas peculiaridades que
la diferencian de los demás soportes y, al mismo tiempo, condicionan la
construcción del relato. Pero también es importante analizar por separado las
diferentes modalidades discursivas que existen en la radio, porque cada una
tiene unas características propias que afectan al estilo comunicativo y a las
normas de redacción. Citamos esto porque en el tema propuesto se hace
referencia a los mensajes que se emiten diariamente en la Radio y cómo ellos
influyen en la escena cultural y sobre
todo cómo ellos se multiplican en el diálogo cultural dominante.
En esta parte tocaremos el tema de la cultura oral y diálogo
radiofónico; que está referida a la apelación de la palabra con el tiempo, para
Bubnova la realidad del lenguaje de Bajtin como acción es la pluralidad de
lenguajes sociales y los recursos ideológicos. Como sabemos en el discurso radiofónico se combina la palabra hablada,
que es la base sobre la que se construye el mensaje, con la música y otros
efectos sonoros. El mensaje oral se construye pensando en una
audiencia definida. Habitualmente se utiliza una sintaxis sencilla, un tono
coloquial y directo, y un ritmo conversacional. Se busca tanto la expresividad
como el calor en el mensaje que se transmite por la voz. La música cumple
diversas funciones: puede identificar un programa o una emisora (la sintonía),
puede servir de introducción o de cierre de un programa o marcar las
transiciones de una parte a otra, puede remarcar o enfatizar algún comentario.
Los efectos sonoros, entre los que puede incluirse
el silencio, contribuyen a estructurar el mensaje, a crear ambientes, a
subrayar estados de ánimo, a dar verosimilitud. Además, es un fenómeno acústico, donde sonidos y mensajes se clasifican
en función de su perceptibilidad. La Presencia del factor comunicación e
interacción entre emisor y receptor. Constituye una realidad acústica-
auditiva, que de una u otra manera desea recuperar las características de la
cultura oral.
Fernández señala que
el efecto de inmediatez se refuerza cuando se mediatiza lo hablado, la captura
del sonido, la relación que existe entre
el sonido y la fuente o voz del
individuo; causan una expresión materialista en la cual el desarrollo del
mensaje, géneros y estilos suelen desaparecer.
Hace unas semanas se
nos preguntaba, cuál es el órgano de los sentidos más necesario en el cuerpo
humano y por qué; se llegó a la
conclusión de que se trataba del oído ya
que por medio de este los seres humanos podemos recrear, reconstruir e
interpretar los hechos de la escena
radiofónica a partir de los datos que
registra nuestra memoria, esta ausencia de anclaje visual provoca una
apariencia de cercanía entre las posiciones distantes en la esfera social. Si nosotros optaríamos por el órgano de la
visión, sería un poco caer en la falta de creatividad, porque este órgano lo
único que logra limitar nuestra capacidad imaginativa. Se piensa también que, la
palabra oral es como una inocencia, pues mantiene un lenguaje que es transcriptible, efímero y memorables.
Como sabemos la radio afirma su rol dentro del
sistema informativo, pero lo delimita frente a prensa escrita actualizando la
referencia de situaciones que captan la atención del oyente manteniéndole cerca
del mundo vital.
En cuanto se
refiere a la participación del receptor y el pseudodialogo, entra a tallar la disque intervención de los
oyentes imponiendo vínculos que generan la ilusión en primer lugar de la participación, que es incluida muchas
veces en bloques centrales de los
espacios informativos que en vez de buscar el diálogo o la solución a los
problemas generan catarsis, y también
tenemos en segundo lugar al protagonismo; que se ve cuando el informador deja
que las personas actúen por sí mismas y fomenten el debate y la única labor que
este realiza es el de mediador pues se limita a obtener información por medio
de preguntas.
De lo anterior
se infiere que el discurso radiofónico es el que acompaña al oyente, sin
estridencias, sin agudización de las contradicciones, sin alardes de sembrador
o de hacedor de conciencias ajenas. Como comunicadores lo primero que debemos
hacer es aprender a comunicar y a utilizar las palabras justas en un momento
adecuado del diálogo, buscando una justa respuesta de la audiencia; me refiero
aquí al juego de palabras, a presentar un relato de manera tal que cree
expectativa. Cuando alguien comunica de esa manera, se convierte en el centro
de atención.
http://www.slideshare.net/cesarmanuel0710/el-discurso-radiofnico-9905803
http://www.youtube.com/watch?v=gJ-TTasxLfY&feature=related
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