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viernes, 28 de septiembre de 2012


PERIODISMO  RADIOFÓNICO
RESUMEN: El periodismo radiofónico, induce a  que la información sea difundida de manera clara, concisa  y sencilla. Para ello, es necesario que el texto esté bien organizado y que facilite una buena  lectura y sobre todo sea fácil de expresar en voz alta. Edward  Murrow,  nos ha  dejado y  legado grandes cosas para ejecutar  la programación radial,  ya que  el nos ha enseñado que  en  Radio las cosas  se narran estando presente en el lugar de los hechos y en tiempo presente, e s decir desechó de  sus  criticas lo que  olía a letra escrita.
 PALABRAS CALVES: Formatos, géneros, Radiofónico, Emoción, Realidad. 
Al hablar  de  periodismo radiofónico diremos que  es una forma de comunicación social, a  través del cual podemos dar a conocer los hechos de interés público por  medio de las ondas  sonoras.
Para Cesar  Hidalgo el  Periodismo Radiofónico, es  entregar noticias  apenas verificadas. No es la lectura de cables de noticias ni  cables, ya procesadas por otros medios, como diarios o revistas. Causan  impacto periodístico  las  transmisiones mediante equipos  móviles desde los lugares mismos donde se ha producido los hechos noticiosos (Hidalgo Cesar 1986)
Por tanto, el periodismo radiofónico, exige que la información sea difundida de manera clara, concisa  y sencilla. Para ello, es necesario que el texto esté bien organizado y que facilite una buena  lectura y sobre todo sea fácil de expresar en voz alta. La lectura en radio hace necesaria una redacción cuidada y adecuada a este medio, que debe hacerse de manera sencilla, mediante el uso de palabras y oraciones comprensibles desde el punto de vista conceptual y fónico; requiere un tratamiento especial ya que  no es  lo mismo dar noticias  por  radio que por  televisión,  ya  que como sabemos en  la televisión  nos ayuda el lenguaje  visual,  mientras que  en la radio esto debe  ser suplido por la forma en cómo  narramos  la noticia. Por otro lado, conviene recurrir a la reiteración de ideas, es decir, dar a conocer un contenido y proceder a su reiteración con el objetivo de que la memoria del receptor lo retenga, ya que el mensaje radiofónico es efímero.
En definitiva, el periodismo radiofónico se resume en la siguiente premisa: Es contar todas las cosas que pasan, en el momento mismo de los hechos, con toda la carga informativa o emotiva y en el menor tiempo posible. Ya que el tiempo es valiosísimo  cuando hacemos radio.
Si nos  remontamos en el  tiempo  veremos  que  antes  las  noticias se hacían en el estudio y dependían de  los periódicos y  de  las agencias de noticias, sin  embargo cuando  apareció el gran Edward R. Murrow, le proporcionó  oralidad, concreción  y el sentido emotivo que toda  noticia  radial debe  tener.
Murrow, le agrega la  temporalidad  a la  noticia radial,  ya que  el cuenta los sucesos desde el lugar de los hechos;  lo hacía  utilizando  un lenguaje  sencillo y comprensible para todos,  así mismo le dio más importancia  a  los sonidos  reales  y además intuyó que  la radio se debe  al oyente y apeló a los  sentimientos más que  a  la  razón.
El comprendió  que  las  palabras que se  decían debían  ayudar al oyente a crear imágenes  en su cerebro de lo que ellos podían captar y así reconstruyan los hechos  también sabía que como periodista debía ser  consciente  de que se dirigía  a un  público más amplio que los consumidores de la prensa.
La radio es el medio en el que algunos géneros del periodismo clásico alcanzan su máxima expresión. Un ejemplo es la entrevista, el debate y la tertulia. La adaptación de los géneros periodísticos a la radio se caracteriza por la riqueza expresiva y el carácter personal que se incorpora al mensaje transmitido. Las claves para una buena comunicación son contenidos concisos, claros y directos. De esta manera se producirá un mayor efecto de atracción sobre la audiencia.
La radio es cuestión de intimidad, casi como una relación pasional entre emisor y oyente. Este pálpito lo hemos sustituido por la rutina informativa, la narración fosilizada y el contenido predeterminado. Nuestra radio trabaja la actualidad como la única forma posible de realidad, pero lo real es lo permanente; no lo contingente, lo fugaz. Cada día la narración es más rígida, más escueta, menos fresca. Hay mucha gente que "habla por la radio" y muy poca que hace radio al hablar. Hemos perdido gran parte de la capacidad de sorprender, de impulsar la imaginación, de medir el tiempo del relato -e incluso su oportunidad-; de entretejer la realidad y la emoción del verbo, la actualidad y la estética, el esencial informativo  y lo hemos sustituido por el monótono dar en el mismo clavo durante horas, cada día de la semana. Información a golpe de rueda de prensa y notas de los gabinetes de comunicación. Pues bien, los tiempos han cambiado. El inmovilismo comunicacional en una sociedad dinámica se paga con la exclusión. 

Ahora  bien  en este punto debemos  sumergirnos y poner en práctica todo lo  que nos legó Edward R. Murrow,  para  ello definiremos  qué  es un género  y qué es un formato. Por  género  entendemos que son  la características generales de un programa y  por  formato entendemos que vienen  a ser las  estructuras de  determinado  formato. Entonces, los géneros son los  modelos  abstractos  y los formatos los moldes concretos de  la realización.
Un formato es en esencia,  la organización  de  elementos de un programa, a  menudo  grabaciones  musicales,  en una secuencia que atraiga y mantenga la atención del segmento  poblacional al que una estación  está buscando, por ejemplo el  formato “éxitos del  momento” , se  elabora con  las canciones  más populares vendidas a   una  audiencia compuesta principalmente por  los jóvenes y adolescentes.(Hausman Carl)
Entre tanto  también podemos hablar acerca de la clasificación de los géneros,  y  para ello diremos que  estos tienen su origen en el periodismo escrito. Ahora  bien, diremos  que  el  medio escrito  existe  con el  propósito principal de informar  , mientras que en el medio audiovisual, el  objetivo de informar solo ocupa una  pequeña parte  de  la programación del  medio.
Debemos agregar  que  Mario kaplun, agrupó  a los  programas en  géneros  musicales  y habladas y caracterizó  doce modelos o formatos,  posteriormente Walter  Ouro Alves, enriqueció la  tipología de Kaplun, que se  basaba en la estructura  y la complejidad.
Durante la época de  oro de  la radio los  formatos incluían efectos de programación imaginativos y  a menudo deslumbrantes, entre los cuales  se  incluía el trabajo de orquestas sinfónicas.  También el  apogeo  del teatro  de la  imaginación, pues los productores apreciaron,  en todo  su valor el impacto de  este medio de comunicación.
El sonido que distingue a  una estación es e l conjunto de música,  emisiones  vocales, tiempo, ritmo, y otros elementos de producción que s e  combinan para crear un perfil coherente e  identificable.
 La estación moderna diseña  y afina con cuidado  su formato para captar una  audiencia objetivo cuantificable.
Los que  hacen  radio  moderna  aun  realizan su trabajo  con  mucha  imaginación. Hoy  en  día se utilizan una amplia variedad de  elementos  de  radio tradicionales (además del  nuevo equipo digital computarizado) para crear  efectos.  A pesar de  los avances técnicos, la habilidad del radialista sigue siendo pieza fundamental.
Ciertamente va en aumento la tendencia que se inició en la década de los setenta para hacer de la radio un medio especializado con programación única. Sólo noticias, sólo música, sólo deportes. Esta fragmentación abandona el paradigma de la "radio total" y va en busca de los gustos personales de los oyentes. La suerte, hasta la fecha, ha sido caprichosa con estas iniciativas. Cuando se trata de radios musicales es más pronunciado el éxito relativo. Primero, porque existe una cantidad sustantiva de oyentes que acuden a la radio como medio de compañía. No olvidemos que uno de los grandes males de nuestras sociedades es la soledad, cuya peor versión se ha inventado en Occidente: la soledad rodeada del prójimo. La soledad acompañada, que es la peor de todas. Segundo, porque las empresas dedicadas a la música tienen costos más reducidos. Tan reducidos, que han llegado a eliminar locutores y técnicos porque la tecnología les permite programar días enteros sin presencia humana. 
En todo caso, incluso estas emisoras se han dado cuenta que es imprescindible darle alguna variedad al discurso musical. Por eso, por ejemplo, en Europa, radio Sky incluye cada hora boletines informativos.
En conclusión la radiodifusión, gracias a la tecnología y al paso del tiempo también ha evolucionado y esto  ha dado paso a que los que  hacemos  radio tratemos de buscar las  formas para que los oyentes se identifiquen con la programación  y puedan mantenerse escuchándola, pero para ello  hay que saber llegar a la audiencia, y para lograr eso es necesario utilizar nuestra imaginación,  y decir las cosas como son verdaderamente sin escaparnos de la  realidad, estructurando bien nuestras noticias.
SITIOS WEB:
REFERENCIAS:
ARAYA  RIVERA Carlos, Géneros, programas y formatos radiofónicos: algunas reflexiones para su distinción.
COMAS  Eva, El inventor del periodismo radiofónico. Estudio de las crónicas radiofónicas  de Edwar R. Murrow.  Barcelona 2005
HAUSMAN Carl,  BENOIT Philip, Producción en la Radio Moderna, 5°  Edición  Cengage Learning Editores, 2001
HIDALGO CALVO  Cesar. Teoría y práctica de la propaganda contemporánea. Andrés  Bello, 1986. p 132


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